Cuando te ví me reconocí en ti de forma casi inmediata, una emoción me recorría completa porque tus palabras fueron llegando de a poco y a cuenta gotas a mi. Atravesaste mi coraza, y lograste germinar mis manos y nacieron letras y acuné contigo hojas de pequeñas historias compartidas.
Y fue mi necesidad la que hizo que cualquier momento fuera bueno para que surgiera una idea. Llenaste mi estómago de mariposas y de pájaros mi cabeza. Me atrapaste en tu mirada sin mirarme. El leerte y saberte ahí era mi aliento..
Ahora te has ido y como siempre, las palabras no dichas hicieron lo suyo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si tienes algo que decir: